Mi hijo quiere donarme un riñón (y no hay manera de convencerle de que NO lo haga). Estamos ahora con todas las pruebas.
Me llamo Antonio y tengo una glomerulonefritis por una infección, ya que tengo hepatitis C. Durante años he vivido con esta enfermedad y tomando mucha medicación diferente, hasta que me llegó el momento de tener que hacer diálisis. Recuerdo muy bien que fue cuando cumplí 57 años. Debido a mis problemas de salud tuve que dejar un trabajo ya que, de entre todas las opciones que me ofrecieron los médicos para hacerme diálisis, opté por ir al Hospital.
Los días que tengo diálisis me recogen en casa y vamos varios pacientes con el mismo problema al hospital en el mismo transporte que facilita el Hospital. Al terminar, nos van dejando a cada uno en su domicilio.
Mi calidad de vida ha mejorado mucho desde que empecé la diálisis, pero los médicos me han dicho que esto es una situación temporal, porque lo que realmente necesito es un trasplante. Mi hijo quiere donarme un riñón (y no hay manera de convencerle de que NO lo haga). Estamos ahora con todas las pruebas. Espero que todo salga bien, porque me han asegurado que su salud no se verá afectada a largo plazo.
No puedo negar que me da mucho miedo enfrentarme a esto, y me negué en principio a que mi hijo me donara su riñón, porque también nos han dicho que la enfermedad puede volver, aunque reciba un riñón nuevo. Espero que no sea el caso, y que este esfuerzo de mi hijo no sea en vano.
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